El cambio de paradigma en el sector Wellness y Spa
El cambio de paradigma en el sector Wellness & Spa Part VIII Quo Vadis Wellness en la era PostCovid19
'Dead End' para la antigua normalidad en un SPA! Bienvenida a la nueva era de Wellness!
Experiencia Wellness PostCovid ¿un antes y un después? Inquietudes y expectativas ante la vuelta a una nueva normalidad
Arantxa Morales Lopez, Ex-alumna del Master Spa & Wellness Management de la Wellness Spain Academy ha trabajado en una encuesta entre las compañeras para averiguar y mostrar una opinión generalizada de cómo afrontar esta vuelta al trabajo con la nueva normalidad y sus inquietudes sobre cómo se va a realizar esta reincorporación post-covid.
La primera pregunta era: ¿Cómo afrontas la vuelta?
La vuelta al trabajo mayoritariamente se afronta con cautela, miedo e incertidumbre. Es una situación complicada y novedosa por lo que todos nos encontramos ante la incógnita de cómo va a ser nuestra "nueva rutina". Evidentemente también con muchas ganas de volver a nuestro puesto de trabajo y reencontrarnos con compañeros y clientes. Esta situación es un parrón enorme en nuestra vida y estamos deseando volver a reanudarla.
Con la vuelta al trabajo, aunque sea de manera progresiva, también ayudamos a conseguir esa nueva normalidad que tanto ansiamos y contribuimos a restablecer la maltrecha economía.
Juntos afrontamos una nueva etapa, nuevos retos. Somos diferentes y cada uno desde nuestra situación, nos disponemos a avanzar preservando nuestra seguridad y salud, así como la de los demás.
Tenemos mayor conocimiento y más cautela debido a la incertidumbre por los cambios que puedan producirse en el futuro. Por eso, estar alerta, extremar las precauciones.
¿Cómo crees que afectará a nuestro sector?
Nos afectará principalmente a nivel de cantidad de tratamientos, porque los tiempos de limpieza se amplían, y por lo tanto deberá bajar el número de tratamientos a realizar en la jornada laboral.
Los ingresos se verán también reducidos por esta disminución de tratamientos así como algún puesto de trabajo que se puede perder, esto crea bastante incertidumbre dentro de nuestro entorno porque todos tenemos miedo a perder el trabajo en este momento tan complicado.
También al comienzo habrá un mayor desembolso debido a todas las medidas de seguridad que tendrán que implantar en todos los centros.
Nuestro sector se verá afectado de forma negativa. Vivimos en una zona donde principalmente los clientes son del turismo estranjero, por lo que si la llegada de estos turistas se restringe o disminuye nuestra afluencia también.
Con los nuevos rebrotes que se están produciendo, se acrecienta aún más la sensación de que una vuelta al confinamiento por lo que sería una catástrofe enorme, a nivel generalizado pero sobretodo en las islas, ya que el turismo es el principal motor de la economía.
¿Qué medidas consideras que tendremos que implantar?
Concebir nuestro sector con distancias, prácticamente imposible, por lo que el trato directo con el cliente debe de realizarse guardando todas las medidas de protección posibles.
- La forma de realizar los tratamientos, cambiarlos para dar más seguridad y fiabilidad tanto al cliente como a los trabajadores. Revisar los protocolos y adecuarlos a la nueva situación.
- Minimizar contactos regulando aforos en zonas comunes, como salas de espera, zonas de aguas, vestuarios, gym…
- Extremar las medidas higiénicas desinfectando zonas periódicamente, para evitar riesgos por contacto.
- Adaptar el horario del centro a las franjas horarias de mayor afluencia de clientes en nuestro spa.
- Es importante elaborar o actualizar los planes de contingencia ante la crisis para los acontecimientos de cierre y arranque en el futuro,
¿Cambiará el tipo de cliente?
Aquí nos encontramos con diferentes opiniones, unas piensan que si va a cambiar el tipo de cliente pasando a uno de mayor poder adquisitivo debido a la crisis económica que vamos a sufrir. En cambio otras piensan que no va a haber diferencia con el tipo de cliente que teníamos anteriormente, porque creen que las personas seguirán rápidamente con su estilo de vida habitual y por lo tanto no tendrán ningún reparo en volver.
Debemos adaptarnos a la merma de turismo extranjero que va a producirse y abrir nuestro mercado al cliente que antes no venía a nuestro spa o que no era tan asiduo, como puede ser, el cliente nacional y sobre todo el cliente local.
La calidad en las islas con el todo incluido se ha ido perdiendo, igual sería un buen momento para buscar otras formas de turismo y volver al modelo anterior. Así mejora intensamente la calidad en todos los aspectos y nos alejamos del turismo de masas.
¿Cambiará la calidad del servicio?
Esta pregunta es la que más consenso ha creado. Si que se va a producir un cambio en la calidad del servicio, pero en este caso será un cambio a mejor, se va a centrar más la atención al cliente, sin prisas y con un trato mucho más personalizado. Al cambiar los tiempos en masajes y la cantidad de ellos tendremos más tiempo para dedicarnos a ofrecer mejor calidad. Con mucho más tiempo para aplicar los tratamientos sin prisas y así poder centrarnos en lo que de verdad debería de importar, que es la felicidad de nuestros clientes. Y que salgan con una sensación única de buen trato y servicio.
Debemos abandonar aquellos servicios que no aporten valor y centrarnos en los importantes poniendo el foco en cumplir las expectativas de nuestro cliente, con nuevas y más exigentes expectativas.
¿Consideras que es un buen momento para el wellness o en cambio será el sector más afectado?
Las opiniones van en torno a la idea de que no va a ser un buen momento para el wellness en nuestra zona (Canarias), refiriéndonos siempre a un hotel spa.
En otros entornos diferentes como centros de belleza u otras zonas de destino, creemos que no afectará tan gravemente.
De igual manera confiamos, en un pronta recuperación en cuento todo esto está controlado.
Creemos que este año la temporada está perdida, de hecho la mayoría aún no han vuelto al trabajo, confiando así que igual a principio de año empecemos con la temporada.
La situación es complicada pero como en todas las crisis algunos saldrán reforzados y otros se quedarán en el camino, evidentemente no todo el mundo podrá salir, pero también creemos en esa pronta recuperación.
¿Habrá más seguridad?
Entendamos que el cliente post covid-19 no es el mismo que antes. Quiere garantías y en eso basará sus expectativas, y la primera y más importante será la seguridad.
Debe de haberla tanto para el trabajador como para el cliente, todos debemos sentirnos en un entorno wellness seguro y fiable con las máximas garantías sanitarias e higiénicas y así realizar nuestro trabajo de manera más efectiva y hacer sentir al cliente que cumplimos con todos los estandards de seguridad necesarios para que estén totalmente relajados y se centren únicamente en disfrutar de la experiencia que les ofrecemos.
Pongamos foco en la seguridad e higiene y no como antes. La seguridad ha pasado ya a ser la máxima prioridad en nuestro servicio. El cliente debe percibir que en nuestras instalaciones están seguros, si no, no vendrán. La seguridad será calidad de servicio y no basta con tenerla, el cliente es el que debe percibirla.
Los procesos internos deben ser revisados y reformulados con prontitud elevando nuestros estándares y niveles de exigencia.
Se producirá una selección natural y un nuevo equilibrio en un escenario que no volverá a ser igual al anterior. La higiene y seguridad en todos los procesos se exigirá al máximo, asegurando una trazabilidad desde las compras hasta el servicio al cliente, pasando por todas las áreas del hotel.
¡'Dead End' para la antigua normalidad en un SPA!
¡Bienvenida a la nueva era de Wellness!