Wellness y Turismo Rural de Carmen Ortigosa Rodriguez
Wellness Rural, la situación del entorno rural en España Part II
Wellness Rural - Aportando valor a la sociedad
Wellness Rural - Fomentando la conciencia ecológica y el respeto por el medioambiente.
Wellness Rural - Aportando valor a la sociedad
Wellness Rural - Aportando valor a la sociedad
El "Wellness Rural" es una opción de futuro real, capaz de dinamizar el sector y generar empleo.
En esa primera idea, el "Wellness rural" consistiría en proporcionar un espacio cuidado y estudiado al detalle dentro de un entorno natural que facilite a la persona que acude a él la reconexión con la naturaleza que nos rodea, con el entorno.
Partimos de un concepto de "Wellness Rural" basado en tres ideas fundamentales:
• Conexión del individuo con la naturaleza, ya que forma parte de ella.
• Conexión del individuo consigo mismo, para poder alcanzar el bienestar.
• Conexión del individuo con los demás, como ser social que es.
Para ello el espacio donde se ubique deberá ser elegido con sumo cuidado, ya que como actividad económica en un entorno natural que es, debe causar el menor daño posible, debe integrarse lo máximo posible para mimetizarse con el lugar, debe tener una clara conciencia ecológica no sólo en la forma en que se ha de desarrollar la actividad, sino también de proyección de cara al cliente, de manera que se reeduque al cliente en esta conciencia ecológica y de preocupación por el medio ambiente y el entorno que le rodea.
Una vez que el individuo toma conciencia de dónde está, entraría en juego el fomentar la reconexión consigo mismo, por eso debe ser un espacio donde se faciliten este tipo de actividades físicas, mentales y espacios poder encontrar momentos de paz y tranquilidad, que lo aleje de los ruidos estresantes del día a día propios de la ciudad como sonidos de móviles, coches, adicción tecnológica etc... y facilite la inmersión en los sonidos propios de la naturaleza.
En este sentido, lo que se trataría de ofrecer con el "Wellness rural" los medios y el entorno apropiado para que el individuo pueda alcanzar el equilibrio entre cuerpo, alma y mente.
Y como ser social que es, el "Wellness rural" consistiría en la reconexión del individuo con los demás en general, y con la familia en particular. Como ser social social que es, alcanzar este grado de conexión es vital, volver a conocer al otro, entender sus motivaciones, saber de sus inquietudes. Momentos que tanta falta hacen en estos tiempos.
A través del "Wellness rural" se trataría de revitalizar esos lazos familiares que aun estando presentes están un poco en el olvido, quizás por la falsa creencia de que siempre van a estar ahí, quizás por la necesidad ficticia de tener que estar conectados con miles de personas de las que nos separan miles de kilómetros, en detrimento de las relaciones con las personas que están a escasos metros de nosotros. No se trataría de ningún modo de generar un espacio "cero tolerancia" a la tecnología o redes sociales, sino de encontrar un equilibrio sano en el que todas estas facetas tengan su espacio.
"Wellness rural" sería por tanto un concepto más amplio de lo que hasta ahora se ha venido entendiendo por turismo rural, En definitiva, se trataría de volver a sentar las bases que parecen olvidadas, resetear la mente, el cuerpo y el alma, con el "Wellness rural" volveríamos a los orígenes para de esta forma retomar nuestro camino hacia el futuro.
Crear conciencia de que el "Wellness Rural" es una opción de futuro real, capaz de dinamizar el sector y generar empleo.
Hemos podido ver cómo la industria del turismo ha sido, es y posiblemente será, una de las principales líneas de ingresos de nuestro país, aunque con oscilaciones de demanda España sigue siendo uno de los destinos favoritos por los turistas extranjeros atraídos por nuestro clima, la calidad de los servicios, el patrimonio cultural y social.
Además del turismo tradicional, existe la posibilidad de ofrecer nuestro entorno natural, con parques naturales, pueblos en enclaves realmente mágicos, con gran riqueza cultural, gastronómica y enológica, que junto con la oferta wellness entendida como actividades, tratamientos y servicios para equilibrar el cuerpo, la mente y el alma, darían al cliente mil y una razones para seguir eligiendo España como destino para sus vacaciones, sus escapadas cortas y prácticamente para quedarse a vivir.
Sin embargo, la visión del turismo rural está aún muy dispersa a pesar de los grandes recursos naturales de que disponemos, y de la existencia de clientes potencialmente interesados en venir a disfrutar de los entornos y parajes naturales.
Por tanto, la puesta en firme por la concienciación de que el "Wellness Rural" es una verdadera actividad económica con un gran futuro por delante es necesaria. Para ello hay que tratar de fomentar la implantación de la regla de "24 horas x 7 días a la semana x 365 días al año", frente a la actual del "Jueves a Domingo" se hace cada vez más necesaria.
Los empresarios han de ser conscientes de ello, un negocio que quiera ser considerado como tal y ser tomado en serio, no puede ser el fruto de una dedicación parcial, es necesario mimarlo, cuidarlo, generar nuevos contenidos que den opciones al cliente a venir en cualquier época del año, hay que tomar conciencia de que es necesario reinventarse, incorporar conceptos como "holístico" "meditación" "autoconocimiento" y darles cabida en el mundo rural y que, como en todos los sectores, tocará invertir en él.
De esta conciencia colectiva surgirá la necesidad de hacer frente común, fijar unos objetivos de negociación con las administraciones en aras de poder presionar para la mejora de la red de conexiones, fomentar el "Wellness rural" con la creación de eventos y ferias para dar visibilidad al sector, política de creación de empleo e inversiones.
Y como consecuencia necesaria de todo lo anterior se hará preciso un compromiso real por parte de los empresarios del sector para trabajar en la búsqueda de la excelencia y la profesionalidad del sector, instaurando las condiciones precisas para la obtención de un sello de calidad con reconocimiento nacional e internacional, apostar por la formación del sector, para de esta forma dificultar el intrusismo y la economía sumergida que tanto daño está haciendo al sector y al propio entorno.
Las posibilidades son infinitas… en un sector en pañales cualquier aporte que se haga en este sentido será importante y sentará las bases de lo que pueda venir en un futuro. Y las consecuencias de esta toma de conciencia empresarial, se verán reflejadas sí o sí en la sociedad, como veremos más adelante, con la generación de empleo y la revitalización de las zonas rurales.